¿Qué tiene que hacer San Martín para poder salir de perdedor? ¿Cómo se hace para dejar ese incómodo lugar en la tabla del Tetradecagonal? ¿Cuál es la receta para poder lograr algunas victorias que renueven la confianza del hincha? A la hora de responder todas las anteriores preguntas, Sebastián Pena no anda con vueltas. “Sólo tenemos que dejar de cometer errores infantiles”, sentencia el DT. Clarísimo.
Aunque parezca repetitivo, al entrenador no le entra en la cabeza de que su equipo sufra tanto por sí solo, que se autodestruya, que libre al azar su suerte de manera tan sencilla. “Trabajamos, hablamos y tratamos de que eso no pase más. En lo futbolístico estoy conforme porque de a poco vamos mejorando en el concepto de juego, en qué es lo que debemos hacer para tratar de poner en aprietos al rival. Pero eso no alcanza y eso no me sirve”, dice dejando en claro que no está del todo bien. “Vos podés tener errores, pero no esos que te terminan matando. En esta fase todos los goles que nos hicieron fueron por licencias nuestras. Eso no quiero más”, agregó.
Pena quiere un cambio, sobre todo en la concentración. Sabe que ese punto es lo más flojito que tuvo el equipo y quiere mejorarlo cuanto antes. Por eso, en su cabeza, comenzó a armar el equipo para el duelo contra Deportivo Roca. “Va a haber cambios, sin dudas”, explica aunque prefiere parar la pelota y hacer todo con calma. “En la práctica de fútbol (que será hoy, a las 17, en La Ciudadela) voy a probar variantes. Quiero dejar definido todo cuanto antes”, acotó.
La vuelta de Lucas Bossio es una fija. “Sí; también quiero esperar la evolución de Darío Cajaravilla, que está mucho mejor, aunque no sé si llegará. Y tengo una duda que quiero tratar de resolverla durante la sesión de fútbol”, afirmó Pena.
Por su parte, Lucas Bossio, quien cumplió la fecha de suspensión, también apuesta a terminar con la malaria. “Estamos muy amargados y sufriendo el momento que estamos pasando. Por eso necesitamos volver a ganar y dejar atrás los errores que nos están tirando abajo”, dijo el capitán, que apunta a cambiar el chip de cara a lo que se viene. “Nos hubiera gustado, y lo necesitábamos de acuerdo a lo que representa San Martín, estar arriba peleando el primer ascenso. Pero nuestros errores nos dejaron prácticamente sin chances de cara al primer ascenso. Por eso hay que pensar bien, aprender de lo que hicimos mal y mejorar para tratar de llegar al segundo ascenso”, finalizó Bossio, dejando en claro, al igual que Pena, que los errores golpearon feo al plantel, pero no llegaron a matarlo. Y según dicen… “lo que no mata, fortalece”.